Hay una gran diversidad de escuelas y ejercicios de Chikung que habitualmente se clasifican según sus principios filosóficos (taoísta, budista o confucionista), según sus aplicaciones (terapéutico, marcial o espiritual) o según el tipo de ejercicios (estático y dinámico).
Nuestro sistema de enseñanza se estructura principalmente a partir de los métodos que integran las escuelas Daoyin Yangsheng Gong® y Yangsheng Taiji Zhang del profesor Zhang Guangde, y de Qigong de Salud Renovado de la Asociación China de Qigong de Salud (CHQA) del Gobierno Chino.
Dichos métodos nos han sido transmitidos directamente por los profesores Zhang Guangde, Catedrático de la Universidad de Deportes de Beijing y una de las cien leyendas vivas del Wushu en China, por su sobrino y sucesor Zhang Jian y su alumno directo en España Miguel Martín. Además, en nuestras enseñanzas han estado presentes los estilos, Neiyang Gong, de la Dra. Liu Yafei del Hospital de Recuperación de Qigong de Bedaihe-China y E-Mei Qigong taoísta de la montaña E-Mei del profesor Zhang Ming Liang.
Cabe mencionar que ha sido el trabajo y el buen hacer del profesor Miguel Martín, Fundador y Director de la Escuela Oficial Española de Daoyin Yangsheng Gong® y de la Asociación Española de Qigong de Salud Renovado, el que nos ha dado la posibilidad de formarnos en nuestro país contando con toda una delegación de profesores especialistas en Chikung y Taichi procedentes de diferentes universidades chinas.
Para una mayor concreción de nuestro sistema de enseñanzas en Chikung a continuación, ofrecemos algunas de características teóricas y prácticas del mismo que lo configuran como uno de los sistemas más completo, estructurado y estudiado científicamente.
Nuestras prácticas se basan en los principios de la filosofía Taoísta (la armonía con la naturaleza, la flexibilidad, la suavidad, la simplicidad, la espontaneidad, el silencio y el estar presentes “aquí y ahora”) y de la filosofía budista (el desapego, el despertar de la consciencia o el darse cuenta de la cosas, la compasión y la transparencia).
Se fundamenta en las teorías de la medicina china y en los conocimientos sobre las artes marciales chinas, pero también tiene en cuenta los avances en las ciencias de la salud y el deporte, tratando de acercar el conocimiento empírico de oriente al conocimiento científico de occidente.

Agrupa multitud de prácticas que combinan los ejercicios dinámicos (movimiento corporal que hace que la energía fluya por todo el cuerpo y produzca equilibrio energético, tipo mano vacía o con instrumentos como el palo, la pelota, el abanico…) y los ejercicios estáticos (posiciones inmóviles que hacen que la energía se acumule y proporcione fuerza interna, tipo meditaciones o visualizaciones guiadas).
Todos los ejercicios tienen implicaciones sobre el cuerpo, la respiración y la mente. La mente debe estar concentrada y atenta para guiar los movimientos y la energía (Qi), en coordinación con la respiración. Los movimientos (rotaciones, extensiones, flexiones, giros…) del tronco y las extremidades deben ser suaves, sin tensión, fluidos, amplios, coordinados y gráciles (sin rigidez). Y, finalmente la respiración debe ser abdominal (natural o invertida), silenciosa, profunda y sincronizada con el gesto.
Ana Castro. Directora y docente en el Centro Yu Shan.